Escrito por Arantxa Vizcaíno-Verdú
https://doi.org/10.3916/escuela-de-autores-185
En la actualidad, Google Scholar es una herramienta esencial para la ciencia y sus potenciales lectores. Sin embargo, su sistema de indexación dista de ser perfecto. Esto se debe, en gran medida, a la gran cantidad de información de la que bebe (Internet), donde las imprecisiones dependen de contenidos duplicados, omisión de datos, atribuciones erróneas, entre otras cuestiones. La mayor parte de estos problemas están adscritos a sistemas de búsqueda y software de análisis sintáctico que recopilan información por doquier, convirtiéndose en una plataforma frustrante para la academia. Especialmente, cuando la plataforma no localiza los artículos y, con ello, sus citas.
Es cierto que, para determinar con exactitud por qué un artículo no aparece en el perfil de Google Scholar, siempre debemos revisar el caso en detalle. Si alguna vez te ha pasado esto, existen una serie de factores que te pueden ayudar a identificar por qué la plataforma puede estar omitiendo alguno de tus trabajos:
- En primer lugar, la base incluye diferentes tipos de documentos que deben ser accesibles y estar disponibles en un sitio web (principalmente académico). Esto es, aquellos sitios web personales que introduzcan trabajos de investigación o resúmenes no publicados todavía pueden no parecerle suficientemente académicos al sistema, omitiéndolos del perfil.
- El resumen y la primera página disponible del texto deben estar inmediatamente disponibles, de modo que se facilita a la plataforma acceder a la información. Si el enlace llevara asociados anuncios, cuadros de inicio de sesión u otras rutas no directas, Google puede ignorarlo.
- Si el sitio web que alberga ese documento está configurado incorrectamente para el lenguaje de Google Scholar o está plagado de errores de servidor, el sistema no lo encontrará ni indexará. Lo mismo ocurriría si requiriera más de diez clics para pasar a la página de inicio.
- Principalmente, el textos de los artículos y/o resúmenes debe estar disponible en archivos PDF. Es poco probable que la plataforma indexe correctamente un artículo que conste de varios archivos o un archivo con varios documentos.
- Los documentos que superen los 5 MB de tamaño no serán indexados. Es por esta razón por la que documentos como tesis doctorales y similares deben ser cargados manualmente en la plataforma para que sean finalmente indexados.
- Es posible que los documentos que empleen un formato poco convencional no se indexen, ya que el sistema está configurado para identificar contenidos convencionales como: títulos destacados en negrita seguidos del nombre de los autores y una lista de referencias final.
- La información bibliográfica y referencial también debe presentarse de forma convencional, completa y precisa. De lo contrario, el sistema puede ignorarlo al no facilitar un documento con hipervínculos operativos y útiles.
- Si existen varias versiones de un mismo documento (un preprint y un artículo final), es posible que la versión final no aparezca tan rápidamente. En estos casos las versiones acaban fusionándose, pero los cambios en el título, nombre de autores y otros puede retrasarse.
- Las revistas consideradas “depredadoras” no se incluyen en Google Scholar.
- Es posible que un artículo se elimine del sistema si se traslada de una ubicación original a una nueva ubicación en línea. Por tanto, siempre que se modifique una URL debe utilizarse una redirección a la nueva ubicación.
- Los nuevos artículos tardan semanas, a veces meses, en añadirse. Las actualizaciones sobre estos pueden tardar aún más cuando se realizan cambios. Por lo tanto, solo queda paciencia, o añadir manualmente el trabajo y esperar a que lo indexen para unificarlo en tu perfil.