Este artículo de Silva-Díaz et al. se sitúa en un punto clave de la agenda formativa del profesorado: no tanto “si” utilizar tecnologías inmersivas en educación STEM, sino qué lugar ocupan en la construcción de la competencia docente.
El diseño empírico, apoyado en el cuestionario CUTE-STEM y desplegado sobre una muestra amplia (N=544) con submuestra de seguimiento (N=58), permite trazar un mapa bastante nítido del “piso de partida”: un colectivo de futuros docentes que muestra alto interés por la tecnología y reconoce de manera casi unánime el potencial educativo de la RV, RA, robótica y sensores, pero que se percibe menos competente para operativizar ese potencial en prácticas concretas. La decisión de combinar datos cuantitativos con análisis de contenido aporta densidad interpretativa a lo que, de otro modo, quedaría reducido a una colección de medias y desviaciones estándar.
El núcleo más sugerente del trabajo está en la articulación entre formación complementaria y cambio en las percepciones de facilidad de uso. La intervención TEC-STEM + ACRI, basada en experiencias inmersivas con visores comerciales y en el diseño autónomo de recursos con CoSpaces, no modifica el reconocimiento previo del potencial de estas tecnologías (ya muy alto), pero sí desplaza de forma significativa la percepción de dificultad en RA y RV inmersiva, con tamaños de efecto moderado-alto.
Esa combinación de uso experiencial y producción de recursos propios funciona, en la práctica, como un pequeño laboratorio de apropiación tecnológica: los participantes dejan de ver la RV exclusivamente como un dispositivo espectacular y comienzan a reconocerla como una herramienta abordable, aunque todavía exigente en términos de gestión de aula, coste y logística. Las respuestas cualitativas ilustran bien esta tensión entre entusiasmo pedagógico y conciencia de las restricciones materiales e institucionales.
El trabajo sugiere, con datos y no con consignas, que la clave no está en “exponer” al futuro profesorado a tecnologías inmersivas, sino en acompañar procesos de diseño didáctico, gestión de recursos y análisis crítico de sus condiciones de uso, integrados de forma estructural en la formación inicial. Ahí se abre quizá el flanco menos desarrollado del artículo: se apunta la necesidad de estrategias de formación más ambiciosas, pero no se exploran en detalle modelos curriculares ni dispositivos institucionales que permitan pasar del seminario optativo a una política formativa sostenible. Precisamente por eso, el texto resulta útil como punto de partida: ofrece un diagnóstico sólido, instrumentos replicables y una descripción honesta de los límites actuales sobre los que cualquier propuesta de integración de tecnologías inmersivas en la formación docente tendrá que trabajar.
---
Cómo citar: Silva-Díaz, F., Carrillo-Rosúa, J. ., Fernández-Ferrer, G., Marfil-Carmona, R., & Narváez, R. (2024). Valoración de tecnologías inmersivas y enfoque STEM en la formación inicial del profesorado. RIED-Revista Iberoamericana de Educación a Distancia, 27(1), 139–162. https://doi.org/10.5944/ried.27.1.37688









